¿De la cárcel a una nueva vida?

Por Francisco Villalobos
 

Luis acaba de ser sentenciado con el castigo máximo que la legislación penal juvenil del país lo permite (15 años de cárcel). Su delito, cometer un homicidio, es el más incurrido en jóvenes, según las estadísticas del Ministerio de Justicia. Es trasladado al Centro de Formación Juvenil Zurquí; tiene 16 años.

¿Qué posibilidades tienen Luis y las otras 579 personas en proceso penal juvenil activo -sea privado de libertad o con medidas alternas- para reformarse y construir una nueva vida alejada del delito? Se lo contaremos en este reportaje.

Volvamos a Luis, cuya identidad se mantendrá anónima, por ser menor de edad. Se le sentenció por homicidio y fue enviado al Centro de Formación Juvenil Zurquí (CFJZ) en noviembre de 2021, el único especializado en el país para recibir a los menores de 18 años, cuya libertad ha sido privada.

Existe también el Centro Especializado Ofelia Vicenzi (CEOVI) pero recibe a jóvenes de entre los 18 a los 21 años, sancionados por delitos cometidos durante su minoridad.

Visita el reportaje de Francisco aquí.

 

Reportaje publicado en CRHoy.com

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