Sólo 4 de cada 100 transexuales logran ganar secundaria

Ya casi amanece y su ganancia fue de solo 7 mil colones. Agotada, llega a aquel cuarto en el centro de San José que aspira a ser su hogar y con la blusa que aún guarda el aroma de su último cliente intenta retirarse el maquillaje de su rostro. Fanny Murillo forma parte del 96% de la población transexual del país que se prostituye como medio de vida, ya que el sistema educativo no le ofrece lo necesario para poder salir adelante.

Sólo 4 de 100 transexuales logran ganar secundaria

De acuerdo con la Fundación Transvida que ha sido la encargada de darle escolaridad a casi 500 transexuales, solo el 4% de este grupo minoritario logra obtener la educación secundaria completa, ya que se enfrentan a una serie de problemas ligados -principalmente- al acoso psicológico, obligándolos a desertar.

María Laura Hernández, psicóloga de Trans-formando (organización en la lucha por los derechos trans), asegura que las principales causas de la deserción del sistema educativo son el bullying, la falta de apoyo familiar y la discriminación que sufren a lo largo del año lectivo.

Se intentó conocer el número de personas de la comunidad LGBTI (Lesbiana, Gay, Bisexual, Transexual, Intersexual) que estudia en los centros educativos del país, sin embargo, el departamento de comunicación del Ministerio de Educación Pública (MEP) no respondió a las consultas.

Un sistema que rechaza

Una de las causas más comunes (de la deserción) es la falta de apoyo por parte de la familia e incluso, la institución educativa tiene mucho que ver, ya que las personas trans suelen recibir un trato sumamente diferente. Por lo general se sienten tristes porque no se les reconoce su nombre, los compañeros les hacen bullying e inclusive los profesores los castigan por el largo del pelo, las uñas pintadas… En el sistema educativo no hay derecho a la expresión, es nulo y si empiezan a cortarles todo, hay una desmotivación que los lleva a desertar”, señaló Hernández.

Sólo 4 de 10 transexuales logran ganar secundaria

Para el psicólogo Diego Delgado, la constante discriminación y bullying generan en la persona una serie de emociones negativas como la tristeza, ansiedad, depresión, inseguridad y hasta la tendencia a ideas suicidas, por lo que los afectados tienden a abandonar el centro educativo en el que estudian.

Por otra parte, Delgado mencionó que la falta de apoyo familiar en algunos casos es producto de creencias y pensamientos con los que vienen estructurados mayormente los padres acerca de la sexualidad e inclusive la religión. Esto sucede más frecuentemente del padre o madre hacia sus hijos, pero también entre hermanos.

Pequeños avances

Un estudio realizado por la empresa Transgender Europe indica que Costa Rica es una de las naciones latinoamericanas menos amigables con la comunidad LGBTI, a pesar de que el país ha tenido avances en esta materia.

El pasado 24 de marzo, Megan Chavarría de 25 años, se convirtió en la primera mujer transgénero del país en recibir el título de bachillerato con su nombre de manos de la Ministra de Educación, Sonia Marta Mora. Antes de ese día, las pocas personas trans que lograban graduarse recibían el título con su nombre registral y no con el cual se identificaban.

Otro paso importante ya se había dado en el 2015, cuando la Ministra de esa cartera envió una circular a todos los directores regionales y funcionarios en general, donde indicó que el Ministerio de Educación era una entidad libre de discriminación por orientación sexual e identidad de género.

Asimismo, en la unidad temática de Afectividad y Sexualidad, contemplada en los programas de Ciencias de secundaria, se incluye desde el 2014 el concepto de la diversidad como tema obligatorio de trabajo en las clases de sétimo, octavo y noveno año, en todos los centros educativos del país.

Sólo 4 de 10 transexuales logran ganar secundaria

Sin embargo, aún existe una brecha de conceptualización y la edad de deserción de la población trans continúa siendo entre los 11 y los 13 años, según el último censo realizado por Transvida.

La resolución del caso de Megan, abrió el portillo para que otras chicas se gradúen con su nombre en el título. A finales del año pasado el proyecto “De las calles a las aulas” el cual consiste en dar educación secundaria a la población transexual del país, obtuvo el premio de aporte a la mejora de calidad de vida de los costarricenses.”, comentó Camila Schumacher, docente de Transvida.

Y ese no es el único portillo que ha logrado abrirse, actualmente el MEP tiene una planilla de tres educadores que imparten lecciones en Transvida, lo que hace que se tenga una ayuda profesional y que poco a poco se reconozca el derecho de esta población a recibir lecciones en un ambiente libre, en el cual son llamados por su nombre, donde conviven como compañeros y compañeras y no como competencia en las calles.

Luego de que uno ingresa a trabajar aquí (Transvida) tiene otra visión. Uno escucha comentarios de la gente y no saben lo dura que es la realidad de estas personas. Vienen cansadas de trabajar toda la noche, con hambre, a veces ni tienen tiempo de dormir y aún así vienen a clases para buscar superarse”, comentó Katherine Fallas, docente de Cívica y Estudios Sociales, de esa fundación.

Otro reto: trabajar

En diciembre busqué trabajo en todo lado, mi cédula trae el “conocido como” y por ley tenía que ponerlo en el currículum, así que dejé casi 40 currículum y no me llamaron. Hice de todo para evitar prostituirme y eso ha significado pasar días sin comer… De diciembre a enero me tocó comer una vez al día y de día por medio, para poder mantenerme”.

Para Keythlyn Soto, las bajas, -por no decir- nulas oportunidades laborales, son su pan de todos los días. Ella se levanta pensando en que -tal vez-  la única forma de poder sobrevivir el otro año sea prostituyéndose.

Soto tiene un bachillerato de enseñanza de la matemática que le otorgó la Universidad de Costa Rica (UCR) el año pasado y actualmente está cursando una licenciatura en la misma carrera, pero aun así no tiene como defenderse.

Según un estudio de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) del 2016, el 28% de los entrevistados fueron discriminados o presenciaron algún tipo de agresión por su orientación sexual e identidad de género.

El informe indica que las principales causas de discriminación y agresión surgen a partir de la forma de vestir (entre 33% y 44%), el aspecto físico (entre 25% y 40%) y comportarse muy femenino siendo hombre (entre 24% y 28%).

María Laura Hernández, psicóloga de Trans-formando, mencionó que sólo el 4% de las mujeres transexuales tienen una ocupación distinta al sexo, debido a que el comercio sexual llega a ser la única opción de estas para poder sobrevivir y llevar el día a día.

Existen chicas que ingresaron siendo menores de edad a la explotación sexual comercial y se quedan porque tienen razones de anclaje, ya que empiezan a recibir un pago por sus servicios e incluso se mantienen en la prostitución en la mayoría de edad”, agregó Hernández.

Ayuda clave

Actualmente, Transvida tiene tres proyectos claves que comprenden la parte de educación y empleabilidad. Se trata de el proyecto “De las calles a las aulas” que le ha dado escolaridad a casi 500 transexuales; el programa “Empléate” que refuerza la parte de inserción laboral y el proyecto “Empresas diversas”, que permite la insersión laboral en varias compañías transnacionales.

También en esta organización se desarrollan convenios con la UCR, la Universidad Latinoamericana de Ciencia y Tecnología (ULACIT) y el Instituto Nacional de Aprendizaje (INA).

En las dos primeras instituciones realizan Trabajo Comunal Universitario (TCU) como una herramienta para colocarse en el mercado laboral. En el INA estudian inglés como complemento a sus carreras y un plus para la hora de solicitar empleo en lugares como Amazon, Concentrix o Hewlett Packard (HP).

Hay más oportunidades para chicas trans en empresa privada que en pública, esto porque algunas empresas privadas vienen con una política de diversidad mucho más aplicada. HP tiene más de 6.000 empleados en Costa Rica y cinco personas trans dentro de su población laboral y ellos en realidad tienen un excelente abordaje en el tema”, aseveró Hernández.

El panorama es diferente para los hombres trans en el país. Existen dos asociaciones que velan por los derechos de esta población: Hombres Trans Costa Rica y Síwo Alâr Hombres Trans Costa Rica.

Tomás Campos, Presidente de Síwo Alâr, explicó que a los hombres trans no se les dificulta tanto como a las mujeres el incorporarse al mercado laboral porque por lo general ellos inician una transición más tardía y cuando buscan trabajo ya son profesionales.

Falta camino por recorrer

Sólo 4 de 10 transexuales logran ganar secundaria

Está claro que aunque se han realizado cambios en las reformas de educación, el papel que juega la sociedad es fundamental para detener los casos de transfobia en el país. La ignorancia y discriminación son razones por las que esta población abandona las aulas o bien, según Campos, se ven obligados a dejar el sistema educativo.

La brecha en la falta de igualdad de condiciones para estas personas hace que parezca que no existe una problemática, que no exista el hecho que tengan que comer basura, dormir en cartones y prostituirse en las noches para poder sobrevivir.

Es por esto que cada fuente consultada por CRHoy fue persistente en el hecho de que sólo realizando más reformas en la educación, una que sea más inclusiva y tolerante, se podrán aumentar la igualdad de oportunidades en contraste con la población en general, y sólo así, Keythlyn Soto no tendrá miedo de prostituirse el otro año, Fanny Murillo podrá graduarse y obtener bachillerato y el otro 96% de transexuales sin estudios, podrán terminarlos.

Proyecto publicado en CRHoy.com

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